Querida Milena:
Es curioso, pero estos últimos días, han sido bastante significativos, por la retrospección temporal de un año atrás (finalización del año escolar, de la enseñanza media, Graduación sombríos síntomas de lo que se larvaba), y te he sentido muy cerca.
¿ Como explicarlo sin que parezcan lugares comunes los comentarios?
Lo intentaré: hace más de una semana me acompañaste a clase.
Debía elegir entre muchos trabajos de mis alumnos anteriores algunos, y he aquí que entre tres, estaba el último que realizaste en IV Medio. Fue una impresión cargada de emociones cuando frente al curso leí (no los había seleccionado previamente, sólo los tomé) el nombre del libro analizado y quién lo había realizado, era el tuyo.
Vi nuevamente tu letra y tu nombre allí escrito. Debí controlar mi emoción e intentar continuar, mas no pude. Expliqué de quién era, ellos (mis alumnos actuales) ya te conocían y siento que se alegraron de saber que fuiste igual a ellos, se unieron.
Te gustaba destacar entre los demás, y allí estabas desde un tríptico junto a nosotros, nuevamente.
La magia del encuentro duró casi toda la semana y vi que allí estabas, que todo lo vivido valió, por haberte conocido, por tu ejemplo de vida y tu eterna sonrisa que nos acompaña aún.
Pese a lo anterior extraño tu presencia, aunque tu esencia se manifieste.
¡Cómo olvidar la atención con que aprendías, la ilusión con que te proyectabas, el amor con que te brindabas a los que te rodeaban y esa tremenda alegría de vivir que contagiabas!
Dios llama a su lado a los mejores, alguien lo dijo, y siento que no se equivocaba.
Mientras, continúo con el tríptico escrito por ti y registrado en un sencillo lugar tu nombre. Fue una hermosa emoción que intenté prolongar en esta líneas.
Hasta pronto querida niña, tu ejemplo de vida nos acompaña e impulsa acontinuar.
Un beso
Tu Miss Chely.
Adjunto la imagen del Trítico comentado.
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